De la red |
Este tiempo atrás, cada vez que me asomaba al blog
(tengo que confesaros que no todas las que debiera), me daba un poco de nostalgia
el tiempo de efervescencia, cuando me resultaba fácil escribir y compartir con
vosotros mi estado de ánimo. Me frustraba no encontrarme con ánimo para
escribir, cuando era mucho lo que me apetecía contaros, pues cada vez estoy más
enamorado de Granada.
Pero MOVISTAR
tiraba mucho, el nacimiento del blog fue por el “atraco a mano armada” del gigante de la comunicación. Y aunque el
tiempo lo cura todo, no quita –y no es sensación- que la realidad de estar en
manos de las grandes multinacionales, de que somos meros puntitos en sus manos,
pura estadística… es real, eso no se me olvidará nunca. MOVISTAR
me estafó.
Pero de todo este periodo, con lo que más
he disfrutado ha sido con lo que os he
ido contando sobre Granada, y es lo que me propongo retomar, sin olvidar la terapia,
pues siempre seré un afectado de MOVISTAR, pero eso no me impedirá seguir respirando y viviendo y es lo que quiero,
respirar y vivir al unísono, junto a quien le apetezca pasear por Granada, a
conocer sus calles y rincones; sus historias, cuentos y leyendas.
De la red |
Esa es la propuesta para este cuarto aniversario del “Cuento
de Movistar”, pese al monstruo, seguir soñando por Granada.
Paco H.
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