jueves, 30 de diciembre de 2021

LAS SIETE COLINAS DE GRANADA.


Algo parecido a lo de los ríos de Granada, que de dos se pasan a cinco, ocurre con las colinas de Granada. Y ahí también cuesta trabajo ponerse de acuerdo. Pues cuando hablamos con cualquiera de las colinas de Granada, rápidamente se nos viene a la mente el Albayzin y la Alhambra y en ellas englobamos todo un conglomerado geológico que hace única y original a la ciudad de Granada.
Quizás sea todo fruto del imaginario colectivo que ha ido confeccionando en nuestro recuerdo que Granada, como Roma, está fundada sobre siete colinas, como un bello lienzo que un pintor ha pintado que con el Veleta  como fondo, ha reflejado sobre la ciudad una paleta  de colores y luces infinitas que puede embriagar al más exigente de sus admiradores. 

Aunque me reafirmo que Granada se eleva sobre siete colinas como poco a poco iremos descubriendo.
La imagen es de la red
Hacia el oeste nos encontramos la Colina de Aynadamar o de la Fuente de las Lágrimas donde en tiempos de los árabes se encontraban los más ricos jardines y huertos familiares y de recreo de la nobleza granadina, reconvertido con los cristianos en la Cartuja de Nuestra Señora de la Asunción y en tiempos actuales en Campus Universitario.
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En Granada es como si una colina engendrara a la otra así que pronto nos encontramos en la Colina de San Cristóbal que va rodeando la carretera de Murcia, dejando a sus pies el Cristo de la Yedra y el Camino de San Antonio hasta llegar al mirador de San Cristóbal, con la iglesia y su aljibe a la espalda, desde alli va perdiendose camino del Fargue y Huetor Santillan.
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Desde el mirador de San Cristóbal contemplamos en todo su esplendor la Colina del Albayzin, un punto y aparte junto a la Alhambra en el conjunto de las colinas de Granada. Para ir al Albayzin siempre hay que hacerlo a través de cuestas empinadas que van subiendo bien desde el Arco Elvira, la calle de su nombre, Plaza Nueva o la Carrera del Darro, a través un entramado de callejuelas y placitas que nos van introduciendo en un laberinto de cármenes, aljibes, iglesias y miradores, siempre embriagados por el intenso olor del jazmin, el verde de la hiedra y el colorido de las bugambillas.
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A espaldas del Albayzin se eleva como un gigante que lo custodia el Cerro del  Aceituno. El tiempo parece que se ha parado en este mágico entorno de Granada desde la Cruz de Rauda, su antigua Puerta de Fajalauza y el más elevado de los miradores de Granada que se abre justo delante en la explanada que nos encontramos delante de la Iglesia de San Miguel el Alto. Es la Colina que nos encontramos más al norte de la ciudad, formando ya parte de la Sierra de Huetor Santillán.
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Sin que podamos encontrar una línea divisoria nos encontramos de lleno en la Colina de Valparaíso ya a extramuros de la ciudad y en el antiguo camino de Guadix, con el barrio gitano del Sacromonte y la Abadía de San Cecilio en el monte sagrado donde encontró la muerte el patrón de Granada.
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Desde San Cristóbal o San Nicolás o desde el mirador de la Vera de En medio nos encontramos como se yergue sobre Granada la Colina de la Sabika con la Alhambra que parece mirar desafiante a la ciudad de Granada. Con 790 metros de altitud se eleva a la izquierda del Río Darro.
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Por último la Colina del Mauror con Torres Bermejas y el Carmen de los Mártires al otro lado de la Alhambra y ya cayendo hacia el rio Genil por el Barrio del Mauror ocupado por los judíos desde antes de la ocupación islámica de la ciudad y que algunos lo datan desde el siglo I, cuando el Emperador Vespasiano mandó a Granada un continente de esclavos hebreos con la tarea de batear el dio Genil y el Cerro del Sol en busca de oro.
Y así hemos completado el este recorrido por la bella ciudad de Granada a través de las siete colinas que la rodean y desde las que se pueden completar la belleza inigualable de una ciudad de la que nunca me cansaré de hablar.
Paco H.

sábado, 4 de diciembre de 2021

DEL PUENTE ROMANO DEL GENIL A LA CATEDRAL.


No es fácil que recomendar para ver de Granada cuando no se conoce nada de la ciudad, pues la primera impresión es la que querer ver todo, así que aquí van algunas propuestas para que en función del tiempo y de las ganas se puedan ir eligiendo que rutas hacer.

 

UNA PRIMERA PROPUESTA: “UN ACERCAMIENTO A LA CIUDAD”

Este primer paseo está propuesto para acércanos a Granada, para empezar a conocerla, perdernos por su centro histórico, como una amplia panorámica que nos irá situando de cara a otros paseos más específicos. Te iré indicando que puedes ir viendo durante el mismo, con pequeñas reseñas de cada lugar, más adelante iré publicando entradas más específicas por si en un momento dado, quieres verlos con más detalle y detenimiento.

Los hemos dividido en tres paseos:

Del Puente Romano del Genil a la Catedral. Del sur al centro de la ciudad.

De los Jardines del Triunfo a la Catedral. Del oeste al centro de la ciudad.

De la Catedral al Paseo de los Tristes. Del centro al norte

 

Del Puente Romano del Genil a la Catedral.

Itinerario: Puente Romano del Genil, Jardines del Genil, Plaza del Humilladero, Carrera de la Virgen, Fuente de las Batallas, Puerta Real, Reyes Católicos, Príncipe, Plaza Bibarrambla, Escuelas, Plaza de las Pasiegas (Catedral).

Comenzamos nuestro paseo en la zona de los Jardines del Geníl, junto al puente zirí del Genil, al que los granadinos conocemos como el “Puente Romano del Genil”. El puente es una construcción zirí construida a finales de siglo XI. En este lugar el río Darro se encuentra con el Genil. Si te mueves por el puente y miras hacia el norte, las vistas son impresionantes, a la derecha la iglesia de San José de Calasanz, al fondo la ladera del Barranco del Abogado, a la izquierda los Jardines del Genil, con la Biblioteca Pública, antigua sala de baile de la juventud aristocrática de Granada de principios del siglo XX. 

Al otro lado del río, margen izquierdo, podemos encontrar espacios interesantes como unas ruinas interesantes que seencontraron durante las obras del Parking del Violon (S XII ó XIII), más abajo la ermita medieval de San Sebastián (S XIII), cerca de la ermita nos encontramos con el Alcazar Genil (S XIII)  un antiguo palacio árabe. Hacia el norte, justo enfrente de donde estamos, encontramos el Colegio de los Escolapios que aprovecha parte del antiguo Convento de los Basilios y la Iglesia de San José de Calasanz (S XVIII). En el margen derecho, los Jardines históricos del Genil y los Paseos del Salón y de la Bomba.


Avanzamos dejando atrás el comienzo de los Jardines y nos encontramos con la Plaza del Humilladero y la Fuente de lasGranadas, donde comienza la Carrera de la Virgen.

Fuente de las Granadas. Esta fuente ornamental es obra del artista granadino Ramiro Megías, regalo de EMASAGRA a la ciudad de Granada, inaugurada en 2007. Consta de cuatro tazas concéntricas, con más de medio centenar de surtidores de agua. Son varias las interpretaciones que se le han dado a sus motivos escultóricos. El primero son las grandes estatuas escultóricas representando los cuatro accidentes geográficos más importantes de Granada: Sierra Nevada, caracterizada por una mujer que lleva una flor de las nieves en el pelo. La Vega, personalizada en una mujer con una espiga de trigo. El río Darro, representado por un hombre con un plato (que recuerda a las bateas para lavar el oro), a sus pies, y  El río Genil. Cada uno mira el lugar que representa. El segundo motivo es la composición del grupo de las Granadas, como homenaje al nombre de la ciudad. Y el tercer motivo es una mujer semidesnuda con una granada en la mano y que mira a la fuente de las Batallas. Las dos fuentes se encuentran alineadas y si miramos desde mitad de la Carrera a la Fuente de las Granadas, parece que el chorro superior quisiera tocar el pico del Veleta.

Hasta hace relativamente poco, en el callejero de Granada aparecía como Carrera del Genil, aunque los granadinos la conocíamos como la  Carrera de la Virgen, porque a mitad de la calle tiene su casa, la Basílica de la Patrona de Granada, la Virgen de las Angustias. Quizás de los más destacado de la Carrera de la Virgen es que es una de las calles más bonitas de Granada con aspecto de bulevar, que recuerda las ramblas catalanas, de inspiración francesa. Forma junto a Plaza de la Mariana, la Plaza del Campillo y a los Paseos del Salón y de la Bomba un amplio entramado urbanístico fruto del periodo francés del General Sebastiani (1810). La delimitan las Fuentes de las Granada y de las Batallas.


Basílica de Nuestra Señora de las Angustias. Qué decir de la Virgen de las Angustias, cuando ella y la basílica merece una visita detenida. Comenzó la construcción de la Basílica de las Angustias en 1617, bajo la dirección de Juan Luís Ortega. Presenta una nave, crucero, capilla Mayor en alto, y ocho laterales. Su fachada está flanqueada por dos altas torres con chapiteles cubiertos de tejas vidriadas, y sobre la portada, hornacina que acoge una "Piedad" de Bernardo y José de Mora. 

En el interior de la Basílica de Ntra. Sra. de las Angustias destacan las estatuas sobre repisas de los Apóstoles, obras de Pedro Duque Cornejo.

También hay lienzos de artistas de la escuela barroca granadina, como Juan Leandro de la Fuente, Ambrosio Martínez o Miguel Jerónimo de Cieza.

En el centro del Retablo Mayor, se encuentra la imagen de la Virgen de las Angustias, patrona de Granada, que cada año sale en procesión el último domingo de Septiembre. En su origen esta imagen era una Soledad, tallada de pie con los brazos pegados al cuerpo y las manos cruzadas, con túnica azul y sin manto. La imagen actual se debe a la intervención en ella del escultor Pedro Duque Cornejo. Tras el retablo se encuentra el Camarín, que si se hizo en la misma época que la iglesia, sería el segundo realizado en España, después del de los Desamparados de Valencia. 


Plaza del Campillo. Emblemática plaza cargada de vida y de historia. Formaba un todo con la de la Mariana y con el Edificio Cervantes, zona que fue dividida a principios del siglo XIX ocupando tres niveles: la zona que ocupó posteriormente la Plaza de la Mariana, el Teatro Napoleón, que paso a ser El Principal, para terminar siendo el Teatro Cervantes y más recientemente el edificio actual; y por último la actual plaza del Campillo.

A la derecha nos encontramos el Castillo de Bibataubin, mandado construir por los Reyes Católicos en el lugar sobre la antigua puerta árabe que abría la ciudad al sur. El Restaurante Chikito donde estaba la cafetería Alameda, lugar de encuentro de tertulias de escritores, políticos y artistas granadinos, como la famosa tertulia del “Rinconcillo con Lorca, Falla… Y a nuestra izquierda el Edificio Alameda, donde estuvo el hotel del mismo nombre, lugar de alojamiento de visitantes ilustres de finales del XIX y principios del siglo XX.

Fuente de las Batallas. Hermosa y monumental fuente de estilo barroco punto de encuentro de los granadinos y lugar de celebraciones deportivas. No hay datos de su origen, aunque como muchas otras fuentes de la ciudad parece proceder de algún convento, concretamente del claustro del convento de Belén de los frailes mercedarios, actual cuartel del MADOC junto al triunfo. El nombre de “las Batallas” tampoco está claro, aunque parece indicar el espacio, en la zona “extramuros” de la ciudad en la edad media se reunía el ejército para pasar revista. Indicar también que por la zona ocupada por el tráfico, está el “embovedado” del río Darro a su paso por el centro de Granada.


Puerta Real de España, es el km 0 de Granada. Prácticamente la confluencia de las calles Ganivet, Reyes Católicos, Mesones y Recogidas y el comienzo de la Acera del Casino (por el antiguo casino de Granada) y la Acera del Darro (la más cercana al río Darro) hasta la Fuente de las Batallas y el comienzo de la Carrera de la Virgen. Lo de Puerta Real le viene a que en 1624 el Rey Felipe IV visitó la ciudad y la puerta que allí existía la de Bib-al-rambla árabe, conocida a comienzos del siglo XVII como la del Rastro o de la Paja por el puente que allí había sobre el rio Darro, se adornó y mejoró, pasando a concersela como “Puerta Real”.

Esta zona ha sufrido muchas transformaciones, pues hasta mediados del siglo XIX el rio Darro iba descubierto por esta zona (las principales calles de Granada hasta esa época eran Elvira y San Jerónimo). Con el embovedado del Darro (1854-1884), esta zona adquirió mucha importancia, desplazando la clase pudiente granadina de Elvira, Plaza Nueva a la C. Reyes y Puerta Real. La Gran Vía no se abriría hasta comienzos del Siglo XX y la Calle Ganivet mediando ya el siglo.


En la Plaza del Carmen se encuentra el Ayuntamiento de Granada, edificio construido sobre el antiguo Convento del Carmen, que como casi todos los Conventos masculinos pasaron a manos privadas o del estado con la desamortización de Mendizabal. Del antiguo convento solo queda el nombre de la plaza y el patio del Ayuntamiento que era el claustro del antiguo convento, la plaza la ocupaba la iglesia con una alta y esbelta torre.

En la fachada del Ayuntamiento se encuentra la escultura de bronce “El instante preciso”, un jinete con los ojos vendados monta sin silla, con la mano izquierda agarra la brida y en la derecha sujeta una bola dorada como las que pisan las patas izquierdas del caballa, la obra simboliza un momento de felicidad plena.

En el costado izquierdo del Ayuntamiento se encuentra la Calle Mariana Pineda, en la que aún se conserva una antigua entrada al convento con el escudo carmelita.


La Plaza de Bibarrambla toma su nombre de la cercana Puerta de Bib-al-rambla (Puerta del río) traslada a los bosques de la Alhambra, mucho más pequeña en el periodo nazarí durante el que desempeño un papel importante por ser la entrada a la ciudad hacia la zona comercial y mercantil del Mercado de Seda de la Alcaicería y del Zacatín, alrededor de cuyas calles se fraguaba la vida comercial de la ciudad. En esta plaza se han celebrado fiestas, tornas, corridas de toros, autos de fe… hoy es un espacioso espacio de recreo y esparcimiento rodeado de cafeterías y restaurantes, con las típicas “carocas” de las fiestas del Corpus

Con la llegada de los Reyes Católicos sufrió grandes transformaciones, ampliándose casi el doble, llegando a tener casi el tamaño actual. Hoy la preside la fuente de los Gigantes, con graciosas farolas fernandinas y con los típicos quioscos de flores, que han ido dejando paso a los recuerdos para los turistas.

En la parte contraria a la catedral, se encontraba la “Casa de los balcones” un edificio con arcos donde trabajaban los escribas y estaban las aduanas para controlar las especias y los textiles que entraban a la ciudad.

Entrado por la Calle Escuelas hacia la Plaza de las Pasiegas nos encontramos la que fuera la fachada principal del Palacio Arzobispal obra de Juan Puganire en la que se conserva las trozas originales del edificio. En la fachada se encuentra una talla en mármol policromado de la Virgen de las Angustias, patrona de la ciudad y en la esquina con la Plaza de las Pasiegas una magnifica lápida dedicada al insigne eclesiástico, filósofo y escritor granadino Padre Francisco Suarez.


La plaza de las Pasiegas es una pequeña y recoleta plaza de poco más de 1000 m2, distribuida en dos niveles. Al principio se la conoció por la plaza de las flores, por ser el habitual lugar del mercado de flores, que fue derivando a plaza Bibarramba, aunque a principios del siglo XIX fue cambiando al actual de las Pasiegas, por ser el lugar que habitualmente  ocupaban varias mujeres de la comarca del Pas en la actual Cantabria, que tenían allí tiendas de telas, otros autores derivan el nombre de ser el lugar donde las amas de cría pasiegas daban de mamar a niños expósitos o que eran contratadas como amas nodrizas por familias de la burguesía granadina para que amamantara a sus hijos.

Lo más llamativo de la Plaza de las Pasiegas es la imponente fachada de la Catedral de Granada, dedicada a la Encarnación obra cumbre del Renacimiento español, comenzada en 1506 en estilo gótico por Enrique Egas. En 1529 Diego de Siloe se hace cargo de las obras, que cerraría cubiertas en 1563 con un proyecto mucho más ambiciosos. La termino con girola y cinco naves, en lugar de las tres habituales.

En 1609 decayó el empuje de las obras en tiempos de Felipe II de su construcción, aunque se concluyó la facha principal ideada por Alonso Cano en la que se introdujeron elementos barrocos. La magnificencia de la del conjunto hubiera sido mayor si se hubieran erigido las dos grandes torres de ochenta metros de altura previstas en los planos. El proyecto no fue terminado por diversos problemas, entre ellos la muerte de Alonso Cano en 1667, y otros económicos, por lo que finalmente en 1684 la Catedral quedó con una sola torre, formada solo por tres cuerpos en lugar de los seis previstos y con un total de cincuenta y siete metros de altura.

En la cercana Plaza de Alonso Cano nos encontramos con la Iglesia del Sagrario, construida sobre la anterior en 1706 por Francisco de Hurtado Izquierdo y José de Bada en estilo rococó que rompe la sobriedad del conjunto.

Enfrente de la Iglesia del Sagrario nos encontramos con el Palacio Arzobispal construido a principios del siglo XVII por Ambrosio de Vico y con la Curia Metropolitana que fue la antigua sede de la universidad granadina, construida por Diego de Siloe.


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